El láser de alta energía es un diodo capaz de generar pulsos muy cortos y de alta energía de hasta cien watios en periodos muy cortos de tiempo con lo que conseguimos un gran efecto analgésico a gran profundidad. Es un láser revolucionario ya que no existe otro láser en el mercado que atendiera a esta necesidad de alta energía y profundidad sin llegar a quemar al paciente.
Es un diodo con dos barras generadoras de energía que puede alcanzar hasta 120J/cm cuadrados, aunque para la práctica clínica sólo usamos hasta 100 en la modalidad continua, la cual es una potencia bastante considerable y adecuada a nivel terapéutico. Dispone de un sistema de refrigeración líquida del diodo debido a las altas temperaturas que alcanza.
La gran ventaja de este láser es la combinación del alto poder analgésico y el efecto antiinflamatorio y regenerativo para la recuperación de los tejidos.
Se puede aplicar en muchos campos, sobre todo en el musculo- esquelético, como articulaciones (procesos artrósicos, artritis), cápsulas, ligamentos, esguinces, contusiones, tendones, músculos (rotura muscular), afectación neural (síndrome del túnel carpiano, neuralgia del trigémino), etc.
Es un láser de escasa divergencia, que evita la pérdida de energía durante la aplicación.
Lo podemos activar en modo pulsado o modularlo para focos inflamatorios agudos y tiene un haz de luz muy ancho por lo que se puede aplicar en zona muy amplias a gran velocidad.
Alcanza gran profundidad, potencia, aplica grandes niveles de energía, su aplicación es totalmente segura, es fácil de manejar, es una herramienta muy polivalente y para nosotros es indispensable porque acorta los tiempos de recuperación por sus grandes efectos analgésicos, antiinflamatorios y regenerativos.
Tu salud es nuestra prioridad y estamos especializados para brindarte la atención experta que mereces.
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